Un hito que valida nuestras acciones y nuestro compromiso.
Podemos ver los primeros brotes verdes de recuperación en nuestro camino regenerativo. En EcoCitizen no medimos el éxito en dinero, sino en cambios tangibles hacia un futuro verdaderamente sostenible y regenerativo. Un mundo de ecosistemas restaurados, comunidades empoderadas y con menos desigualdad.
Hoy se produce uno de esos cambios. Mediante un decreto ministerial publicado en el Memorial del Gran Ducado de Luxemburgo EcoCitizen ha recibido la acreditación oficial (agrément) como empresa de impacto social (Sociedad de impacto social – SIS).
Este reconocimiento, tras un examen riguroso de nuestros comportamientos, acciones, estados financieros, estatutos jurídicos y planes futuros, confirma lo que hemos estado construyendo desde el principio: una organización comprometida con las personas, el planeta y sus objetivos. Cada decisión difícil que tomamos está dirigida a tener un auténtico impacto social y ecológico, y especialmente donde más se necesita.

Nuestro viaje hasta ahora ha sido profundamente humano. A finales de 2019, un puñado de científicos e ingenieros costarricenses afines radicados en Europa iniciamos algunas conversaciones para construir algo que permitiera un mayor alcance para nosotros como profesionales, y para otras personas como nosotros. El Acuerdo Verde Europeo nos dio motivos para la esperanza. La pandemia nos dio determinación y nos mostró cómo podría funcionar, en la práctica, una organización "primero a distancia".
Movida también por la férrea convicción de que no se debe penalizar a las mujeres por ser madres (como yo), EcoCitizen nació en el mismo periodo en que yo fui madre, con el objetivo de atraer a personas brillantes, incluidas las que han decidido ser padres, sin que se las acose y se las deje de lado.
En 2023 arrancamos sin inversores, subvenciones ni ayudas, totalmente dependientes de los primeros contratos en ciencia rigurosa de interés público y asesoramiento ético. Empezamos a construir la plataforma.
No queríamos ser una "consultora" más. Desde el principio, invertimos un tiempo y un esfuerzo valiosos en conseguir la acreditación gubernamental temprana como organización de investigación (concedida como AgrRED/24-004 - ER).
Queríamos desmarcarnos deliberadamente del lavado verde que inunda el mercado con marcas superficiales y de quienes desean sacar provecho de la emergencia climática y el colapso de los sistemas naturales. Creemos de verdad que nuestro trabajo como ingenieros, científicos, investigadores, gestores de proyectos, pero también como madres, padres y miembros comprometidos de nuestras comunidades, debe impulsar una transformación real, no sólo hojas de Excel e informes, sino algo diferente. Un nuevo sistema. Actividades humanas que resulten netamente positivas para el medio ambiente y las sociedades que nos rodean. Regeneración de lo que ha sido tan dañado.
Convencidos de que teníamos que ser capaces de prestar servicios (consultoría, asesoramiento, talleres, formación, desarrollo tecnológico y servicios de investigación científica) decidimos constituirnos como empresa y operar como un de facto sin ánimo de lucro, demostrándolo a lo largo del tiempo mediante la publicación transparente de los estados financieros. Optar por constituirse como empresa en lugar de asociación sin ánimo de lucro supuso una ardua lucha desde el principio, renunciando, por ejemplo, a una exención fiscal anticipada.
Sin embargo, queríamos hacer lo correcto, y hacerlo de la manera correcta.
Hemos operado leansalarios mínimos, meses de supervivencia, intentando aprovechar al máximo cada oportunidad. Sin embargo, hemos encontrado esperanza a pesar de las dificultades. La gente cree en nuestra visión, misión y valores. La gente quiere ayudarnos a construir esto, y hacerlo suyo también. Hemos invertido felizmente en nuestra propia gente, de forma justa y con recursos. Los tiempos han sido duros, pero no sentimos amargura, sino una tranquila determinación: nos comprometemos a reinvertir hasta el último céntimo para generar un trabajo digno y significativo para quienes están alineados con nuestra misión y nuestros valores.

Este SIS alinea nuestra estructura con nuestra ética. Nuestro 100% de facto sin ánimo de lucro ha sido validado ¡por decreto ministerial! EcoCitizen ahora también está exenta de impuestos y puede recibir donaciones exentas de impuestos de organizaciones y particulares (ahora tienes una gran opción para decidir cómo utilizar tus impuestos para un impacto y un propósito positivos) y filantropía. Esto significa que podemos atraer y canalizar aún más recursos en beneficio de quienes más lo necesitan.
Con sede en Luxemburgo, EcoCitizen se ha enfrentado al escepticismo en el extranjero, pero también dentro del país. No podemos hacer mucho contra la reputación de ciertos sectores. Lo que podemos hacer es hacer lo que decimos que vamos a hacer, y dejar que nuestras pruebas y hechos hablen por sí mismos. Para nosotros eso significa equidad, por encima de las finanzas.
En EcoCitizen creemos que Luxemburgo tiene potencial para convertirse en un centro europeo de acción por el clima y la naturaleza: ¡tenemos los cerebros y los recursos para hacerlo realidad! Como recién llegados éticos, sólo la transparencia puede ser nuestra prueba. Nuestros motivos son claros: medios de vida dignos, no a la explotación, no al daño planetario. Realmente estamos tendiendo puentes entre el Norte y el Sur.
Para EcoCitizen, se trata de un verdadero parteaguas. Un momento decisivo, un hito. Estamos profundamente agradecidos a los compañeros de equipo, mentores, aprendices y socios que nos han sostenido a lo largo del camino. Habéis alimentado nuestra esperanza desafiante.

Esperemos que este nuevo momento traiga contratos más firmes, nos permita ampliar nuestra investigación transdisciplinar que repara vidas en medio de las crisis, aunque sepamos que somos meros pececillos ante la magnitud de la emergencia.
Es como si el sol atravesara la niebla. Valida nuestro propósito por encima del beneficio y nos inspira a regenerarnos, juntos. Vamos a crecer, saludablemente, con colaboradores, socios, simpatizantes y aliados.
Adriana... sentirse tenaz... ¡y transformador!
